El acceso al financiamiento es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las pequeñas y medianas empresas (pymes) en el actual contexto de altas tasas de interés. Ayer, el Ministerio de Producción y Trabajo y la AFIP anunciaron la implementación del sistema de factura de crédito electrónica, una herramienta que permite a las empresas venderla en el mercado para conseguir capital. El costo, sin embargo, aún es alto, con un piso no inferior al 30% de interés.
"Con este sistema se busca que las pymes expandan su
financiamiento, logren mayor liquidez en un plazo menor, cuenten con
un nuevo instrumento de inversión en el mercado y tengan certidumbre
sobre la fecha de cobro de las facturas emitidas por grandes
empresas", dijeron en el Gobierno.
El sistema será parecido a lo que ocurre con el descuento de los
cheques diferidos avalados, que ayer, en el Mercado Argentino de
Valores (MAV), cerraron a una tasa de 43,40% para el que tiene un
vencimiento a 30 días; a 43,16% para el 120 días, y a 44,12% para el
de 365.
Para su implementación, la AFIP diseñó un cronograma de los sectores
en los que comenzará a funcionar el sistema. Desde este mes, las pymes
proveedoras de la industria automotriz ya pueden descontar las
facturas de las grandes automotrices en el mercado.
A partir del mes próximo, se sumarán los sectores de suministro de
agua, cloacas, gestión de residuos y recuperación de materiales y
saneamiento público, servicios de suministro de electricidad, gas,
vapor y aire acondicionado, y de servicios de intermediación
financiera y seguros. En junio se incorporarán la industria
manufacturera y los sectores de petróleo y explotación de minas y
canteras. En julio, el de la construcción y de transporte y
almacenamiento.
En agosto entrarán en vigor los servicios inmobiliarios; enseñanza;
salud; servicios sociales, artísticos, culturales, deportivos y de
esparcimiento; servicios de asociaciones y personales; y
agropecuario.
En tanto, en septiembre se podrán descontar las facturas en los
sectores de servicios de alojamiento y comida, profesionales,
científicos y técnicos, actividades administrativas, y servicios de
apoyo, información y comunicaciones.
Finalmente, en octubre llegará el turno del comercio mayorista y
minorista, uno de los más esperados por las pymes.
"El cronograma se estableció para que los sectores donde es más
complejo implementar el sistema arranquen después. Ya funciona en la
industria automotriz porque hay mucha integración entre las terminales
y las pymes proveedoras", explicaron en la AFIP. También
señalaron que "ahora es más fácil de implementar este sistema
porque se generalizó el uso de la factura electrónica".
Con la retracción del consumo, las pymes sufren un enfriamiento de la
actividad que, sumado a las altas tasas que impulsa el Banco Central
para estabilizar la economía, impacta en su cadena de pagos. Ayer, la
tasa de interés de referencia quedó en 68,32%.
"El Gobierno está tratando de moverse en una dirección en la que
antes no se había movido. Efectivamente el problema del financiamiento
es tremendo porque no existe un mercado como sucede en otros países
-dice Vicente Donato, del Observatorio Pyme-. Estamos en un escenario
de estanflación fuerte, del que es difícil salir. En esta coyuntura,
estas medidas no son suficientes, pero en buena hora que se esté
buscando una ayuda".
Ayer, el Movimiento de Pequeñas y Medianas Empresas (Mopyme) realizó
un encuentro en el que presentaron siete propuestas para
"afrontar la crisis actual y ser impulsoras del futuro despegue
de la economía". Entre las medidas, se encuentra la de
"impulsar una ley que garantice el pago a las pymes en el plazo
máximo de 30 días para las ventas de productos y servicios que
realicen tanto a las grandes compañías como a la administración
pública".
Según indicaron, los principales problemas de las pymes son: la baja
del consumo, la presión impositiva, la inflación y la cotización del
dólar, los costos de seguridad social y juicios laborales, la falta de
crédito, la recesión, el aumento de tarifas de servicios públicos y el
poco margen de ganancia.
Fuente: 25 de Abril de 2019 - Sofía Diamante (Diario
La Nación)